Los ministros de Asuntos Sociales de la Unión Europea han adoptado un nuevo Pacto por la Igualdad de Género para el periodo 2011-2020, cuya principal novedad es que incluye medidas para combatir la violencia ejercida contra las mujeres impulsadas especialmente por España.El nuevo Pacto sustituye al que se aprobó en marzo de 2006 por iniciativa de seis Estados miembros: España, Suecia, República Checa, Francia, Finlandia y Dinamarca. Sus tres prioridades son eliminar las desigualdades de género en el ámbito del empleo, incluida la brecha salarial; mejorar la conciliación entre la vida profesional y privada de mujeres y hombres; y combatir todas las formas de violencia contra las mujeres.
En materia de empleo, el Pacto exige a los Estados miembros que adopten medidas para promover el empleo femenino en todos los tramos de edad, combatiendo cualquier forma de discriminación; combatir los estereotipos de sexo para limitar la segregación sexual en el mercado de trabajo; garantizar un mismo salario por un mismo trabajo; facilitar que las mujeres tengan más poder en la vida política y económica; animar a los interlocutores sociales a elaborar planes de igualdad en el trabajo y favorecer una participación igual de hombres y mujeres en la toma de decisiones.
Por lo que se refiere a la conciliación, los Gobiernos deberán actuar para que haya guarderías suficientes y a precios asequibles para atender al menos al 30% de niños/as menores de 3 años; mejorar las infraestructuras de acogida y atención para personas dependientes y facilitar fórmulas flexibles de trabajo.
Finalmente, el Pacto exige a los Estados miembros adoptar estrategias nacionales contra la violencia de género, reforzar la prevención y la protección a las víctimas e insistir en el papel y la responsabilidad de los hombres en la erradicación de la violencia machista.