Las españolas son las más estresadas de los países desarrollados.
Nora Herrero.– Levantarse, preparar el desayuno, despertar y vestir a los niños, llevarlos al cole, llegar al trabajo luciendo la imagen perfecta… Una contrareloj para empezar cada día que, aunque cada vez es menos exclusiva de la mujer, sigue siendo causa de estrés especialmente para ellas.Según se desprende del estudio ‘La mujer del mañana’, de Nielsen, un 66% de las mujeres españolas se sienten estresadas y presionadas por la falta de tiempo, el porcentaje más alto de todos los países desarrollados.
El informe reconoce que se ha avanzado en materia de igualdad con los hombres y que las mujeres controlan cada vez más las decisiones de gastos y progresan en el trabajo y la política. Además, parece que los cambios no quedarán aquí: «casi el 80% de las mujeres que viven en los países desarrollados piensa que el papel de la mujer va a cambiar y un 90% cree que lo hará para mejorar».
Según informa la compañía global de información y medios, las francesas (65%) y las italianas (64%) se sitúan en el segundo y tercer lugar de las mujeres que siente más estrés. Así, indica que este estrés «se nota en los países emergentes incluso más que en los desarrollados. Al mismo tiempo, señala el motivo principal de esta situación es «la obligación de conciliar la vida profesional y familiar».
El estudio también pone de manifiesto que un factor que contribuye a que los niveles de estrés sean más altos en las mujeres de los países emergentes «es el poco dinero disponible que les queda después de cubrir los gastos imprescindibles para poder gastar algo en sí mismas o disfrutar de unas vacaciones». Entre las mujeres entrevistadas de los países emergentes, «las de la India (81%), México (74%) y Rusia (69%) son las que se declaran más estresadas y presionadas por la falta de tiempo», según precisa el trabajo.
En lo referido a la percepción que tienen las mujeres españolas sobre su grado de igualdad con los hombres, Nielsen precisa que «en torno a un 80% de las entrevistadas piensa que los hombres y las mujeres están igual de capacitados para trabajar, cuidar a los niños, tener más educación, más salario, involucrarse en política, tomar decisiones de compra o ser jefe».
A su vez, indica que «la gran mayoría» de las mujeres en España piensa que los dos colectivos «deben compartir en total igualdad las decisiones de compra de casi todos los productos», aunque en algunos casos se mantienen algunos tópicos tradicionales. En este sentido, la empresa concreta que un 52% considera que la compra de productos de belleza e higiene personal «corresponde sobre todo a las mujeres» y que «apenas un 3% dice que la debe tomar un hombre».
«Tienen más oportunidades que sus madres»
Además, las encuestadas en 21 países del mundo «creen que tiene más oportunidades que sus madres». Sin embargo, también opinan que sus hijas «tendrán el mismo nivel de oportunidades que tienen y han tenido ellas en los mercados más desarrollados».
Según afirma la vicepresidenta de Nielsen, Susan Whiting, «las mujeres de todo el mundo están consiguiendo mayores niveles de educación y trabajo y pueden contribuir más a los ingresos familiares». «Las mujeres están aumentando su poder adquisitivo y con ello consiguen un mayor control e influencia en las decisiones familiares», ha añadido.
Finalmente, un 40% de las mujeres encuestadas en los países piensa que sus hijas tendrán mayor estabilidad financiera que ellas y un 54% cree que sus descendientes lograrán una mujer educación. Por el contrario, el porcentaje de mujeres que creen que sus hijas tendrán más estabilidad financiera que ellas en los países emergentes es de un 80%.
INFORME NIELSEN